Gracias a la colaboración entre la Federación Polideportiva de Discapacitados y la Federación de Deportes de Invierno de Castilla y León, podemos afirmar que el futuro del esquí adaptado es ciertamente prometedor. La niña leonesa María Martín Granizo ha irrumpido en el panorama nacional al participar en la Copa de la Cordillera Cantábrica para niños de su edad. Que esquíe a tres huellas no ha sido impedimento para que María pueda disfrutar de igual a igual de este apasionante deporte, gracias a la flexibilidad y buen hacer de la Fedicyl. Pero la cosa no ha quedado ahí. La Comunidad estuvo representada el pasado domingo en el Trofeo Santiveri en Sierra Nevada con cuatro esquiadores, con especial relevancia a los resultados conseguidos por el vallisoletano Miguel Gutiérrez y la leonesa Raquel Martínez.
El joven esquiador, de tan solo 14 años, fue capaz de ser el mejor en la categoría de esquiadores de pie, al superar a participantes de mucha más edad, y conseguir el Trofeo Santiveri al esquiador novel. “Miguel ha sido la auténtica revelación del Campeonato y tiene un futuro muy prometedor si sigue trabajando”, explican desde la Fundación También, organizadora de la cita.
La buena actuación de la expedición castellana y leonesa no se limitó al joven vallisoletano, ya que la representación leonesa también obtuvo grandes resultados. Raquel Martínez, esquiadora con parálisis cerebral y acostumbrada a subirse a lo más alto del podio, también consiguió el primer puesto en la modalidad de mujeres de pie, en una prueba que consistió en un slalom gigante con 32 puertas en la pista del Prado de las Monjas. Además, Martínez consiguió el mejor tiempo de todas las categorías, una muestra de su buen trabajo y progresión.
